"Hola a tu mujer": Emmanuel Macron y Donald Trump muestran su complicidad en la Casa Blanca

Bromas, apretones de manos enérgicos, pequeños elogios y gestos de afecto: Donald Trump y Emmanuel Macron repitieron este lunes 24 de febrero en Washington un dúo de camaradería diplomática ya afinado durante el primer mandato del republicano.

En el Despacho Oval, el multimillonario, ex presentador de reality shows, cuenta cómo, después de una cena en la Torre Eiffel con sus respectivas esposas, el presidente francés se había comprometido a responder, en francés, a los periodistas.

"No había intérprete, él hablaba y hablaba y yo sólo asentía", dijo Trump. "Al día siguiente leí los periódicos y me di cuenta de que no era eso lo que habíamos dicho. Es un tipo inteligente, te lo aseguro", dijo el presidente norteamericano mientras agarraba el antebrazo de su homólogo, sentado a su lado, entre risas del público. Ya lo había descrito, poco antes, como un "hombre muy especial".

Emmanuel Macron habló de una acogida "muy amable, como siempre" por parte del multimillonario republicano, que desde su regreso al poder no ha dejado de criticar a los europeos por sus gastos militares considerados insuficientes y sus impuestos juzgados injustos.

Cuando llegó el presidente francés, ambos hombres intercambiaron uno de esos vigorosos apretones de manos, casi una pulseada, que suelen deleitar a los fotógrafos durante sus encuentros.

Tras haber viajado a Washington para intentar resolver las inmensas diferencias con Donald Trump sobre Ucrania en particular y sobre la relación transatlántica en general, Emmanuel Macron reprende públicamente a su anfitrión cuando Donald Trump, delante de él, minimiza la participación europea en la ayuda prestada a Ucrania.

"No, en realidad, para ser franco, hemos pagado, hemos pagado el 60% del esfuerzo total", intervino el presidente francés, colocando su mano sobre el antebrazo de Donald Trump.

"Estados Unidos y Francia siempre están del lado correcto, eso es lo que está en juego hoy", afirmó más serio el presidente francés, mientras Donald Trump llegó a responsabilizar a Ucrania de la invasión rusa e inició un espectacular acercamiento a Moscú .

También acoge con satisfacción un proyecto querido por Donald Trump, el de garantizar el acceso estadounidense a los minerales ucranianos, para compensar los gastos en que incurrió Washington para apoyar a Kiev desde el 24 de febrero de 2022.

"La fuerza del relanzamiento estadounidense es la incertidumbre para el presidente Putin", añade Emmanuel Macron, que ha comprendido claramente que Donald Trump ve las relaciones diplomáticas como una negociación comercial, que debe llevarse a cabo con gran rapidez y brutalidad si es necesario. Elogia la "capacidad disuasoria" de Estados Unidos y deja que su anfitrión se presente como un pacificador.

Cuando el presidente francés responde a una pregunta en su propio idioma, su homólogo, que no habla francés, dice: "No tengo idea de lo que está diciendo, pero es el idioma más hermoso", mientras coloca su mano sobre la rodilla de Emmanuel Macron.

"Recientemente visitamos al presidente y a la primera dama en Francia. Fue un día hermoso, no lo olvidaremos fácilmente, tenemos muy buenos recuerdos de él", dijo Donald Trump al inicio de la conferencia de prensa.

"Gracias, Emmanuel, por recibirnos en París en diciembre para presenciar la reapertura de Notre Dame. Fue muy triste cuando se produjo el incendio", dijo, calificando la reapertura como "un logro tremendo".

Luego, unos minutos después, Donald Trump elogió "un excelente trabajo" con Emmanuel Macron. "Fue un placer pasar tiempo contigo y un saludo para tu esposa. Nos veremos muy pronto", concluyó Trump más tarde en la conferencia de prensa. Los dos presidentes intercambiaron luego largos saludos.

La relación entre ambos hombres, que nunca se ha tornado abiertamente agria como la del presidente estadounidense con otros dirigentes como el canadiense Justin Trudeau, ha tenido sin embargo sus altibajos durante el primer mandato del republicano.

Podríamos hablar de “bromance”; una contracción de las palabras inglesas "brother" y "romance", pero el jefe de Estado francés también criticó abiertamente el enfoque diplomático "América Primero" del líder republicano, llamando a los europeos a unirse en respuesta.

Emmanuel Macron, invitado a la Casa Blanca en 2018 para una cena de Estado con gran pompa, había ofrecido un arbusto , que luego plantó junto a Donald Trump en el césped de la Casa Blanca.

Pero el árbol, tomado de un bosque donde habían muerto muchos soldados estadounidenses durante la Primera Guerra Mundial, no sobrevivió al trasplante.